Es muy posible que conforme avancen los días y veas el examen cada vez más cerca, te sientas más estresado y presionado😖. Si vemos el estrés y la presión de manera negativa, nos puede paralizar y nos puede hacer sentirnos ansiosos, cansados. Pero la presión también la podemos canalizar de manera positiva: como aquella que nos mueve e impulsa a actuar y superar los retos💪.
Si sientes que el estrés y los nervios te están comiendo te puede funcionar hacer ejercicios de respiración. Siéntate con la espalda recta, cierra los ojos, inhala por la nariz hasta que llenes tus pulmones y luego exhala lentamente por la boca, repítelo 5 veces o hasta que te sientas más tranquilo. Este tipo de ejercicios también los podrás hacer el día del examen si te sientes muy nervioso.
También es necesario darle un tiempo a tu cerebro para descansar y relajarse, para que así pueda recuperar tu energía y potenciar tu aprendizaje. Para eso busca descansar, no desvelarte y mantener tu cuerpo activo: baila, juega un poco, practica algún deporte💃.
Tu cerebro se comunica consigo mismo con la ayuda de aminoácidos, los cuales provienen de proteínas en tu dieta. Comer un desayuno lleno de proteína incrementará tu concentración y reduce la sensación de hambre.
Ubica la sede en la que realizarás el examen, de ser posible trata de ir al lugar para que sepas cómo llegar y no te pierdas el mero día. Te puede servir registrar cuánto tiempo haces entre tu casa y el lugar de aplicación para que preveas ese tiempo el día del examen.
Prepara todos los artículos necesarios para el examen con anticipación. Puedes realizar una lista. Asegurate de llevar varios lápices del 2 1/2, goma, sacapuntas, un reloj de mano, comprobante credencial.
Recuerda, no tienes que llevar dispositivos electrónicos ni mochilas y folders. Debido a las precauciones sanitarias NO olvides llevar tu cubrebocas y mascarilla si deseas.
Probablemente todos te digan que debes dormir bien y es un excelente consejo. Dormir incrementa tu capacidad de atención y reduce el estrés. También mejora tu humor, la memoria y tu función cognitiva. Acuéstate temprano y haz alguna actividad que te relaje como escuchar música. No olvides poner tu alarma para despertar.